lunes, 14 de enero de 2019

Que difícil es cruzar vidas heridas

Ricardo GAranda

Toledo, 140119



Que difícil es el vuelo del sueño,
la alegría del viento suave
que roza nuestras esperanzas
                                   a su antojo.
Que difícil es repetir
el gran sueño del amor
cuando el llanto
se cruza y lo deja en un inútil
                                        despojo.
Que difícil es cruzar vidas heridas
cuando las llagas están abiertas:
                                           al rojo

Que difícil es esperar
lo realmente emocionante
y bello
cuando se ha conocido
el callejón del grito,
el llanto y el silencio.
Apenas nos queda un instante
para protegernos de los duelos
y las sentencias de granito
que han puesto ya su sello
y solo nos permiten el mito
de aquel viejo recuerdo,
acaso baldío,
que añoramos con agónico resuello.

Y mientras la soledad
con resaca de tiempos mejores,
de alegrías, victorias humanas,
amores.
Soledad del vacío
que dejan cuerpo y alma
agotados por el fracaso
de estos tiempos
en los que ya se embalsa el agua
de nuestro herido rio.



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